Jose Antonio Carmona
Editor SeniorCon la llegada del calor, la dinámica del hogar cambia y algunos dispositivos sufren especialmente las consecuencias del aumento de la temperatura. Entre ellos, los televisores modernos, cada vez más compactos y con menos espacio para disipar el calor, se convierten en una de las víctimas más comunes.
Durante el verano, el calor ambiental se suma al generado por el propio funcionamiento del televisor, lo que dificulta la correcta ventilación de componentes como la retroiluminación del panel, el procesador o la fuente de alimentación. Esta acumulación térmica puede provocar sobrecalentamientos que afectan negativamente al rendimiento, a la calidad de imagen y a la vida útil del dispositivo.
Índice de Contenidos (6)
Por eso, es importante ayudar al televisor a mantenerse fresco aplicando una serie de medidas prácticas y eficaces que reduzcan el riesgo y aseguren un funcionamiento óptimo incluso en los días más calurosos.
Evita la exposición directa al sol
En su momento ya vimos que el sol es uno de los principales enemigos de los dispositivos electrónicos, y el televisor no es una excepción. Para evitar que se sobrecaliente en exceso, proteger su funcionamiento y alargar su vida útil, es fundamental no colocarlo en zonas donde reciba luz solar directa.
Hay que tener especial cuidado con aquellos espacios de la casa donde los rayos del sol inciden durante las horas de mayor calor, ya que esto puede provocar un aumento considerable de la temperatura interna del televisor, especialmente si está en funcionamiento en ese momento. Evitar la exposición directa al sol no solo mejora el rendimiento, sino que también previene posibles daños en sus componentes.
Evita colocarlo junto a otros dispositivos que generen calor
Muchos juntos pero con espacio
Uno de los aspectos clave para prevenir el sobrecalentamiento del televisor es no situarlo cerca de otros aparatos electrónicos que también emiten calor. Colocar la tele junto a una videoconsola —como una Xbox, que en verano puede funcionar como una auténtica estufa—, un sistema de cine en casa o incluso el router, puede favorecer la acumulación de calor en esa zona, haciendo que la temperatura interna del televisor aumente y afecte a su rendimiento.
Colócalo en un sitio bien ventilado
Asegura una buena ventilación alrededor del televisor, ya que es clave para evitar el sobrecalentamiento. Para lograrlo, es importante dejar espacio suficiente en los laterales y en la parte trasera, permitiendo que el calor generado se disipe correctamente.
Evita instalar el televisor en muebles cerrados, empotrados o sin una adecuada circulación de aire, ya que esto impide la ventilación natural y favorece la acumulación de calor en el interior del dispositivo.
Una limpieza adecuada
Limpiar el televisor con regularidad es fundamental, y no solo para mantener la pantalla libre de polvo. Es especialmente importante revisar periódicamente las zonas de ventilación, que suelen estar ubicadas en la parte trasera o inferior del aparato.
Si observas acumulación de suciedad, límpiala con un pincel suave o aire comprimido, ya que el polvo y las pelusas pueden obstruir las ranuras de ventilación, dificultar la disipación del calor y, con el tiempo, afectar al rendimiento del televisor.
Limita el uso de la Smart TV en las horas punta de calor
Si no te es posible aplicar las recomendaciones anteriores, reduce el uso del televisor durante las horas de mayor calor, especialmente si se trata de un modelo de gama alta o que tiende a calentarse más al reproducir contenidos en HDR.
Darle un descanso en esos momentos críticos puede contribuir a alargar su vida útil y evitar sobrecalentamientos innecesarios.
Dicho esto, es importante tener especial precaución si decides apagar el televisor desconectándolo de la corriente eléctrica. Lo recomendable es apagarlo siempre utilizando el mando a distancia o el botón físico, y evitar desenchufarlo directamente, ya que esto puede afectar a su funcionamiento.
En el caso de televisores con panel OLED, este gesto puede ser especialmente perjudicial, ya que estos modelos realizan ciclos automáticos de mantenimiento cuando están en reposo. Desconectarlos por completo interrumpe esos procesos y, a largo plazo, puede comprometer la vida útil del panel.
Controla la temperatura
Si dispones de aire acondicionado y notas que la temperatura ambiente es demasiado alta, puedes utilizarlo para enfriar la habitación, lo que también ayudará a que el televisor reduzca su temperatura interna y funcione de forma más eficiente.
Además, puedes apoyarte en sistemas de disipación adicionales, como ventiladores USB, que incluso se pueden conectar al propio puerto USB del televisor. Otra opción es colocar un ventilador pequeño orientado hacia la parte trasera del equipo, lo que favorece la ventilación y contribuye a disipar el calor acumulado.
Para finalizar, no hay que olvidar la importancia de mantener el televisor actualizado con las últimas versiones de software publicadas por el fabricante. Estas actualizaciones pueden corregir errores de funcionamiento, mejorar el rendimiento general del dispositivo y añadir nuevas funciones o parches que optimicen su uso y prolonguen su vida útil.
En Xataka SmartHome | Encender el aire acondicionado justo cuando tienes más calor no es la mejor idea. Estos son los principales motivos
Ver 0 comentarios